El arte de proyectar y dirigir nos hace conscientes de los procesos adecuados para cada caso, tales como:
Exactitud: conciencia, investigación y planificación continua
Velocidad: reducir la resistencia, aumentar la urgencia y centrarse en un foco de resultados.
Flexibilidad: construir equipos flexibles, capacitados y unificados.
Simplicidad: claridad, con objetivos sencillos en los mensajes y procesos.
Carácter: Integridad, tranquilidad y responsabilidad.
Moral: Tener un fin, propósito, reconocimiento y recompensas.